Coscia subrayó que el fallo expresa claramente que el Estado paraguayo deslinda de toda responsabilidad de los hechos denunciados por Arrom y Martí. Sobre el punto, dijo que ni siquiera el informe de los médicos que habían atendido las supuestas torturas que supuestamente recibieron ambos sujetos fueron suficientes para sostener la demanda.
Así mismo, ratificó que la Corte IDH por primera vez falló en su totalidad a favor de un Estado.
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De hecho, afirmó que, con la decisión, se destraban absolutamente todas las posibles dudas que tenga la Comisión Nacional de Refugiados (CONARE) del Brasil para levantar este estatus a Arrom y a Martí.
En ese orden, dijo que no tiene sentido el planteamiento de la defensa de estos sujetos, ejercida por el abogado Rubén Lisboa, quien afirmó que, a través de la ley brasileña de Refugiados, no deberán volver a Paraguay, sino a un tercer país como medida de protección. “Eso es burdo. Una vez que perdés el estatus de refugiados ya son ciudadanos ‘comunes’ y prófugos de la justicia paraguaya”, expuso en comunicación con La Unión, recordando que los dos tienen orden de captura internacional.