Cuando las golosinas son convertidas en arte

Con tan sólo 27 años, este joven está determinado a difundir el arte del Amezaiku, que se basa en realizar mini esculturas de animales que resultan una verdadera obra de arte hecha de caramelo.

 

Se trata de Shinri Tezuka, quien en el 2013 abrió una tienda en su natal japón llamada Asakusa Amezaiku Ameshin. A pesar de que se trata de una técnica antigua, son muy pocas las personas que la siguen realizando y el teme que desaparezca. Incluso, él aprendió por sí solo como realizarlo al no tener quien le enseñara, pero claro eso no lo detuvo. Según comenta, en Tokio, sólo existen dos tiendas que hacen este tipo de caramelo.

 

El precio estimado de cada golosina oscila entre mil o 2 mil yenes, es decir entre $9 o $18 dólares. Y es que requiere una gran habilidad y capacidad para soportar el calor. Aparte que cada moldeado debe ser realizo con precisión y rapidez.

 

 

Con la ayuda de sus manos y en algunos casos pinzas, Tezuka da vida a diferentes animales e insectos como: un pez dorado, una rana, un oso panda, tigres, un perro, ratones, serpientes, conejos, entre otros; estos son los que más llaman la atención de los niños por sus formas y colores. La base es jarabe de almidón que es almacenada para posterior ser calentada y así sea más flexible para moldear las formas, al estar caliente Tezuka debe trabajar con rapidez antes de que el caramelo se ponga duro.

Comentarios