Alejandro Nissen, abogado del José Masi, hermano de la conocida comunicadora Carmiña Masi, relató que su cliente se encontraba a bordo de su vehículo yendo rumbo a su vivienda durante la medianoche del jueves, cuando otro rodado que circulaba frente a él detuvo se detuvo y el conductor descendió a pedir ayuda. Esto ocurrió en la intersección de las calles Chaco Boreal y Cecilio Ávila.
Según narró el abogado, luego de unos minutos, la misma persona que bajó de su automóvil a pedir ayuda apuntó con un arma de fuego a su defendido, exigiéndole que pase al asiento trasero sin bajarse del vehículo y que le entregue todas sus pertenencias.
“Después de eso, llegaron otras tres personas más y subieron al auto, le vendaron los ojos y les apuntaron en todo momento con revólver y pistola”, expuso en contacto con La Unión R800 AM, añadiendo que de esa manera fue trasladado por aproximadamente 15 minutos hasta llegar a un lugar.
Nissen señaló que en ese sitio, sobre el que la víctima no pudo identificar si se trataba de una casa o un departamento, lo subieron por una escalera a una habitación, donde lo encerraron y revisaron sus pertenencias. “Él escucha muchas voces ahí dentro de la habitación, entra en más pánico de lo que ya estaba, se destapa los ojos y ve a un grupo de personas, sobre todo mujeres”, continuó narrando, añadiendo que es en ese instante los desconocidos lo golpearon, le pidieron que entregue todo el dinero que poseía, que eran cerca de G. 3.000.000, principalmente la tarjeta de crédito, y la volvieron a vendar.
Consultado sobre si quien lo encañonaba era una persona trans, versión que surgió de manera extraoficial, señaló que “no estoy seguro, pero no sé si se le puede llamar mujeres”.
Después de esto, lo bajaron del sitio, de nuevo lo subieron a su automóvil y lo trasladaron hasta una iglesia, que se encontraba a aproximadamente cinco minutos del lugar, según dijo el letrado.
“Lo vuelven a vendar, lo suben a su auto y queda de nuevo en poder del primer grupo de hombres”, señaló, añadiendo que lo dejaron abandonado frente a la iglesia San Miguel, del barrio Ciudad Nueva. Fue entonces cuando Masi ya no escuchó a nadie y se sacó la venda, para conducir de nuevo su rodado hasta la avenida Mariscal López. “Hasta ahí llegué lo más rápido posible, ya que queda a 5 minutos de mi casa”, afirmó, añadiendo que allí contaron con apoyo de la Policía Nacional.
Nissen indicó que presentaron la denuncia del caso en la Comisaría 6ª, añadiendo que pedirán que en la investigación se incluyan, si es que encuentran, imágenes de cámaras de seguridad, especialmente en dos lugares clave: el punto que fue interceptado y donde fue abandonado.
El abogado cree que se habría tratado de un intento de secuestro exprés, pero que los perpetradores del hecho se equivocaron de víctima.
De todas maneras, indicó que se trataría de un nuevo modus operandi para la realización de secuestros.