“Es importante asumir la gravedad de lo ocurrido, porque a diario ocurren casos de corrupción pero lo de San Bernardino, marca un punto crítico de inflexión. La pregunta es: ¿cuántos puntos de salida hay de ese lugar en San Bernardino? No hubo reacción rápida, el trabajo de inteligencia fracasó. Falló el post evento, el post acto delictivo y a hoy no se tienen respuestas, ni detenidos mucho menos”, expresó Querey en diálogo con Todas Las Voces por La Unión.
En ese sentido, manifestó que entiende que la organización haya rechazado la presencia policial dentro del recinto del evento. De todos modos, expuso que la Policía Nacional debió haber establecido cordones en ciudades aledañas a San Bernardino, subrayando que esta localidad se ha convertido en un “punto crítico” en los últimos años.
Indicó que el ministro del Interior, Arnaldo Giuzzio, debe dar respuestas ante esta “urgencia”. “Si eso no responde, entraremos en una evaluación política de lo que es su situación, lo cual sería que impulsemos una interpelación y eventualmente el pedido de su destitución ante el presidente de la República”, expresó.
En general, el parlamentario subrayó que el problema principal de nuestro país no es que se hayan instalado organizaciones delictivas, sino el hecho de que las instituciones encargadas de prevenir, controlar y castigar a los transgresores de la ley “están penetrados por estos grupos criminales”. Indicó que lo sucedido en San Bernardino fue un suceso trágico más que se suma a los que venían produciéndose.