La Federación de Cooperativas de Producción (Fecoprod) celebró sus 50 años de vida institucional destacando el aporte del modelo cooperativo al desarrollo del Paraguay. Su presidente, Alfred Fast, remarcó que el gran valor de este sistema está en las personas y en los principios que lo sostienen.
“Estamos muy contentos por la celebración, pero más aún por el desarrollo de las 34 cooperativas socias. Ellas hacen patria cada día. La producción no es fácil, dependemos del clima y de los mercados, pero se ha logrado mucho. Lo más importante en las cooperativas siempre son las personas. El capital es importante, pero no decide; en las cooperativas, cada socio vale un voto”, expresó Fast.
Recordó que la Fecoprod nació con el objetivo de dar voz a las cooperativas alejadas de los centros urbanos. “Hace 50 años no había caminos asfaltados, ni teléfonos, y muchos trasladaban su producción en barco. Para ellos fue vital tener representación en Asunción. Desde el inicio se buscó eficiencia y, sobre todo, contribuir al desarrollo del país”, señaló.
Hoy, la organización se dedica principalmente a la representación gremial, la formación de líderes y la promoción de la producción sostenible. “En los últimos 20 años trabajamos con más de 20 mil pequeños productores que no necesariamente son socios, porque entendemos que apoyar a todos los agricultores es clave para el futuro del Paraguay”, destacó.
Uno de los logros más importantes de las cooperativas ha sido la consolidación de cadenas de valor, especialmente en el sector lechero. “Si no fuera por grandes industrias como Lactolanda o Trebol, muchos pequeños productores no podrían vender su leche. Gracias a las inversiones en leche en polvo, se logra estabilizar la producción y garantizar la compra. Hoy representamos el 89% de la leche que se industrializa en el país, y eso es gracias al cooperativismo”, afirmó Fast.
El dirigente resaltó también la importancia de la capacitación y la confianza dentro del movimiento. “El cooperativismo funciona cuando se aplica con principios y valores. No es solo conocimiento, también es carácter. La confianza es básica. Los valores cooperativos tienen siglos de vigencia y no podemos perderlos, porque son la base para una sociedad más justa y un país más fuerte”, remarcó.
Finalmente, Fast hizo un llamado a la unidad de los distintos sectores: “Así como en la lechería trabajamos en cadenas de valor, en el desarrollo nacional también debemos unirnos con otros gremios y con el gobierno. El cooperativismo no se trata solo de producir, sino de construir juntos el futuro del Paraguay”.