En este foro internacional organizado por la Asociación Internacional de Presupuesto Público (ASIP), con la participación de autoridades económicas de América Latina y de organismos multilaterales, la directora Recalde manifestó que Paraguay está en el puesto 97 de 141 economías, de acuerdo con el Índice de Competitividad Global (GCI) y actualmente es uno de los países mejor posicionado para la producción de hidrógeno verde, gracias a sus recursos hídricos y excedentes de energía eléctrica, energía limpia y renovable.
También mencionó que la gran fuerza laboral y leyes atractivas de incentivos de inversión, la energía barata y la tasa impositiva de un solo dígito sobre las empresas extranjeras, han llevado a un incremento del número de fábricas que operan en el país, provenientes mayormente de Brasil, lo que se ha triplicado desde el año 2014.
Entre las razones para invertir en Paraguay, señaló el esquema tributario competitivo, la creciente diversificación de la economía, los incentivos fiscales, la férrea disciplina macroeconómica, la estratégica ubicación geográfica en la región y su liderazgo en el clima de negocios.
“Paraguay posee el régimen tributario y de beneficios fiscales más competitivo y simplificado de la región. En Paraguay existe una regla muy simple sobre los impuestos: 10-10-10. Esta fórmula refiere a que los tres tributos más relevantes -Impuesto al Valor Agregado (IVA), a la Renta Personal y a la Renta Empresarial- tienen la misma tasa: 10%. Este porcentaje es el más bajo de toda América Latina para los tres gravámenes, exceptuando el IVA en Panamá. Esta característica, que se ha transformado en una política de Estado, es señalada por nuestros gobernantes como una de las fortalezas para desarrollar la economía y recibir inversiones”, remarcó al respecto.
Entre los atractivos incentivos fiscales para la inversión, la directora de Presupuesto refirió que nuestro país cuenta con diversas leyes, regímenes y convenios internacionales que otorgan amplios beneficios a los inversionistas consistentes en: La aceleración de los procesos para la apertura de empresas; el otorgamiento de los documentos de residencia en el país mediante trámites abreviados; la exoneración o suspensión temporal de los aranceles aduaneros afectados a la importación de materias primas y maquinarias; la Ley de Alianza Público Privada (APP), para contratos de participación público–privado; la exoneración del Impuesto al Valor Agregado, (IVA) en las exportaciones, entre otros.
En otro momento de su participación, dijo que durante las últimas dos décadas Paraguay experimentó un crecimiento económico gracias a los términos de intercambio favorables que permitieron mejoras en los precios de los productos que el país exporta y a políticas macroeconómicas sólidas.
Destacó muy especialmente que la idea del nuevo Gobierno es apoyar este crecimiento con fuerza y visión estratégica hacia el desarrollo, para lo cual sus acciones se enfocarán en el bienestar del ciudadano y se sustentarán en cuatro factores de cambio que son fundamentales para el logro de objetivos nacionales que son: Salud de calidad, Seguridad al servicio del ciudadano, Protección social focalizada, Educación de calidad.
Finalmente, sostuvo que los desafíos y oportunidades para consolidar el crecimiento sostenido de Paraguay y atraer inversiones se encuentran en profundizar los logros sociales alcanzados hasta ahora que mejoren la calidad de vida a través de la inversión en el capital humano, brindando educación, protección y seguridad social otros servicios básicos (agua, vivienda y movilidad). Así también en dinamizar la economía para generar más valor agregado con la modernización con tecnología y lograr mayor participación en mercados internacionales.