La fiscal Belinda Bobadilla, quien investiga el caso, mencionó como ejemplo que durante la cuarentena migratoria que debía realizar fue a una consulta médica en un sanatorio privado.
“El 28 de marzo ella recibió atención médica en el Hospital Bautista”, aseveró en contacto con La Unión, indicando que el dato pudo recabar tras pedir un informe a este sanatorio.
Bajac, imputada por violar vedas y cuarentena sanitaria, normativas previstas en la Ley que sanciona delitos contra el medio ambiente, se expone a una pena privativa de libertad de seis a 18 meses o multa. La fiscal Bobadilla solicita su prisión preventiva.
La ida de la exsenadora a este hospital se suma a lo que también se había denunciado como violación de cuarentena, como su desplazamiento a una peluquería, a un banco y al propio Congreso Nacional.
El caso
La senadora María Eugenia Bajac viajó a Perú el pasado 13 de marzo para un evento religioso evangélico. Regresó a Paraguay el 16 de marzo, por lo cual debía guardar aislamiento social hasta el 31 de marzo. Este último día presentó síntomas de coronavirus, por lo cual acudió a un laboratorio privado para realizarse la prueba. Ella debía seguir guardando aislamiento social mientras esperaba el resultado y, pese a ello, la parlamentaria del PLRA fue a la sesión extraordinaria de la Cámara Alta del pasado 1 de abril. El del test del COVID-19 arrojó resultado positivo esa noche.
El pasado martes 14 de abril, en sesión extraordinaria virtual, Bajac fue despojada de su investidura de senadora por la Cámara Alta, acusada de haber utilizado dinero público para realizar ese viaje a Perú.