En una rueda de prensa indicó que los dos policías “perdieron la vida a manos del crimen organizado” cuando atacaron el patrullero en el que se movilizaban en la ciudad costera de Guayaquil (suroeste).
“Estamos tras la pista de los responsables y no descansaremos hasta ponerlos a órdenes de la autoridad competente”, dijo al tiempo de indicar que en otro caso resultaron heridos otros dos policías.
Zapata apuntó que “este año ha sido muy triste y trágico para la policía nacional (pues) con estos dos casos sumamos ya 61 héroes policiales caídos en actos de servicio”.
Según el ministro, además de esos casos en los que murieron dos policías y otros dos resultaron heridos, hubo “seis atentados con explosivos en la ciudad de Guayaquil y tres en la ciudad de Esmeraldas”.
El funcionario formuló un llamamiento a todas las instituciones del Estado “porque esta guerra no es solamente de la Policía Nacional, del Gobierno Nacional, este es un enfrentamiento que tiene el Estado que responder como Estado”.
Y pidió a la comunidad unirse en una “cruzada cívica de convergencia nacional. Hoy más que nunca necesitamos el apoyo”.
El comandante general de la Policía, Fausto Salinas, rechazó en la rueda de prensa “los atentados viles y cobardes” ocurridos en la madrugada y dijo que los hechos de violencia se evidenciaron desde las 23.00 del lunes y continuaron en la madrugada.
Indicó que a la madrugada hubo un intento de amotinamiento de presos en la cárcel de Esmeraldas en rechazo al traslado de reos y siete agentes penitenciarios fueron tomados como rehenes, y posteriormente fueron liberados.
La institución encargada de las prisiones señaló que los traslados se realizan para evitar el hacinamiento en las cárceles.
Salinas añadió que luego hubo la detonación de un artefacto explosivo en una avenida y otra en un vehículo, mientras otro vehículo fue incinerado por cuatro sujetos.
Posteriormente, otro vehículo fue incinerado y después se registraron varias detonaciones alrededor de una unidad de policía. Luego dos sujetos lanzaron un artefacto explosivo a una estación de gasolina, provocando daños materiales.
Más tarde, hubo la detonación de un artefacto explosivo en el interior de un vehículo y luego antisociales, abordo de un vehículo, arrojaron un objeto explosivo a las afueras de una unidad policial.
Después hubo la detonación de un artefacto explosivo al interior de un vehículo escolar, agregó antes de indicar que la delincuencia no amedrentará a la Policía.
Con información de EFE.