Metrobús: Conflicto entre Gobierno y Mota Engil se definiría bajo arbitraje internacional

El Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones comunicó ayer a los directivos de la empresa portuguesa Mota Engil que no renovarán su contrato sobre el fallido Metrobús, que vence el domingo. La firma reitera que quiere cobrar US$ 18 millones antes de irse. Se solucionaría bajo arbitraje internacional.

Óscar Stark, gerente de Reconversión Urbana y del Metrobús, y el titular del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC), Arnoldo Wiens, mantuvieron ayer una reunión con los directivos de la empresa portuguesa Mota Engil, a quienes informó oficialmente que ya no seguirán con las obras del Metrobús.

 

Indicó que el proceso de solución tiene un proceso de tres pasos: el primero, común acuerdo; el segundo, la decisión de un comité de solución de controversia; y tercero, que un arbitraje internacional sea la que resuelva la discusión.

Stark señaló que esta última opción sería la que definirá el caso, ya que Mota Engil pretende cobrar US$ 18 millones por los supuestos costos adicionales que le generaron los retrasos en la liberación de la franja. Por su parte, el Gobierno rechaza pagar ese dinero y, en contrapartida, desea cobrar multas a la empresa por incumplimiento en los trabajos.

La obra se retomará en los primeros meses del 2019, siempre y cuando se subsane previamente el conflicto con Mota Engil, según anunció el MOPC.

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