“Estos canes tienen en promedio 1 año y 3 meses de edad, pero solo quieren jugar, aunque tienen características de obediencia básica. Por eso, los instructores concluyeron que son más para vivir en un ambiente hogareño y que ellos puedan recibir ese cariño de una familia”, explicó Ayala en conversación con La Unión.

En ese orden, indicó que estos perros en particular son “distraídos”. “Quieren más bien jugar y recibir cariño, no se centran tanto, por ejemplo, en el trabajo de búsqueda y detección de drogas”, aseveró.

Los perros en cuestión son llamados “Laika”, “Frank”, “Heishi”, “Bonita”, “Shiro” y “Sam”, de razas labrador y pastor belga malinois.

Las personas que desean adoptar a uno de estos canes pueden acceder a las redes sociales de la SENAD donde encontrarán un formulario y así postularse.

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