“Queda claro que el procedimiento fue oscuro”, aseveró Casañas Levi en diálogo con La Unión. En ese sentido, indicó que, en primer lugar, tiene serios cuestionamientos de constitucionalidad. En segundo orden, dijo que “es una trampa”, ya que en la primera etapa de análisis de méritos “las personas que empiezan en la parte de arriba de la tabla, terminan abajo”.
Así mismo, señaló que las últimas puntuaciones dadas antes de publicar la terna “son arbitrarias”, debido a que no son explicadas por los miembros del Consejo.
“El Consejo de la Magistratura tiene atribuciones para elegir, eso no está en discusión. Lo que sí es cuestionable es que lo hagan de forma poco transparente”, criticó Casañas Levi, enfocando su reclamo de que las elecciones se realicen enfatizando los méritos, como temas de tesis, promedio de calificaciones como estudiante universitario, entre otras cuestiones que considera fundamentales y que se dejaron de lado.
Por su parte, Juan Ramón Bueno Jara, exmiembro del Consejo de la Magistratura, calificó de “vil y desvergonzado” el procedimiento de selección de miembros de la terna.
“No podés dar 20 puntos por audiencia a unos y a otros 13, porque no por hablar bien quiere decir que seas buen jurista. Es un retroceso y una mancha el proceso para elección de ternas para ministros de la Corte”, repudió Bueno Jara también en diálogo con La Unión.
En ese sentido, también cuestionó que no se hayan tenido en cuenta criterios esenciales como aptitudes, títulos y otros méritos.