“Sucedió en una comunidad indígena aledaña al municipio de Santa Rosa del Aguaray, a unos 70 kilómetros del casco urbano. La niña en cuestión fue vista por última vez el sábado, y ante su desaparición, se hizo la denuncia. Nosotros hicimos la intervención. El cuerpo de ella fue encontrado el lunes a 100 metros de su vivienda, sobre una calle vecinal al costado de un arroyo. Según el médico forense, la niña murió por estrangulamiento y también encontramos, pese a que el cuerpo estaba en estado de descomposición, indicios de que fue abusada sexualmente (…) Por eso se enviaron muestras al laboratorio del Ministerio Público, de modo a determinar esta posibilidad”, aseveró Carlos Cabrera, fiscal del caso, en conversación con Enfoque 800 por La Unión.

Indicó que la investigación avanza de manera lenta porque la comunidad indígena a la cual pertenecía la víctima “se cierra a cualquier tipo de colaboración para hablar y aportar datos”. No obstante, dijo que continúan las diligencias “y en días más daremos con el responsable”. De hecho, citó que ya hay un sospechoso.

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