La joven había denunciado que, mientras esperaba un bus en zona del km 1 de Ciudad del Este, dos sujetos a bordo de un automóvil de color negro la subieron a la fuerza, la raptaron y la violaron, para luego abandonarla en zona del km 7. Lo que desde el primer momento llamó la atención de los investigadores es que la mujer denunció que le fueron robados G. 350.000 pero no se llevaron su teléfono celular.
La mujer fue sometida a exámenes médicos ginecológicos, que arrojaron que sí tuvo relaciones sexuales. La cuestión fue desvelándose hacia la realidad cuando en la zona de la parada donde ella estaba esperando el bus no había ninguna imagen de cámaras de seguridad que den cuenta del supuesto rapto. Además, ni la Policía Nacional ni el Ministerio Público encontraron testigos de lo supuestamente ocurrido, pese a que se trata de un sitio con mucha afluencia.
Ante esto, la fiscal del caso, Carolina Gadea, le preguntó qué realmente ocurrió durante la prestación de declaración en la mañana de este miércoles, tras lo cual la denunciante admitió que mintió y que en realidad había prestado servicios sexuales a cambio de G. 350.000 a un joven con quien se encontró cerca del Puente de la Amistad y luego juntos cruzaron hacia el lado brasileño.
El hombre, de nacionalidad brasileña, pese a que inicialmente le entregó el dinero a cambio del encuentro, luego le despojó de él. Fue ante esto que la mujer quedó desesperada y denunció en la comisaría 1ª de la capital altoparanaense el supuesto rapto y posterior violación, informó el corresponsal de Unión TV en Ciudad del Este Marcelo Benítez.
La fiscal Gadea anunció que la joven será imputada por simulación de hecho punible.
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